Argumento: Inès trabaja en una gran empresa alemana establecida en Bucarest. Su vida está perfectamente organizada hasta que su padre Winfried llega de improvisto y le pregunta ”¿eres feliz?”. Tras su incapacidad para responder, sufre un profundo cambio. Ese padre que a veces estorba y que la avergüenza un poco le va a ayudar a dar nuevamente sentido a su vida gracias a un personaje imaginario: el divertido Toni Erdmann… (FILMAFFINITY)
Comentario: Toni es un personaje ficticio dentro de una película de ficción. Él es lo que quiere ser según el contexto en el que se mueva; generalmente entre banquetes y reuniones, asuntos de negocios y trabajo. Un alemán que hace reír aunque suene inusual. Porque, siendo una comedia disfrazada detrás de un drama, no deja de ser comedia.
Maren Ade arriesga todo para contarnos a su manera esta historia de familia. No se limita en el tiempo - cerca de tres horas de cinta - para narrar ingeniosamente un relato entre una hija y su padre. El ingenio está en reflexionar profundamente sobre los vínculos familiares, cada vez más deteriorados por el afán laboral, sin recurrir a los diálogos filosóficos. Son las situaciones entre el padre, la hija y su entorno laboral, los momentos creados por Toni y su particular manera de hacer chistes, la perspicaz forma de reflexión que plantea su directora. Además del gran mérito por mantener el ritmo de la historia en una duración prolongada.
Más allá del humor negro que se esconde entre diálogos y silencios, existe una profunda crítica al entorno de negocios dominado por el coctel y el protocolo, las apariencias e intereses. Y aunque la historia transcurre en Rumania, resulta ser un pretexto para demostrar la universalidad de la ambición del hombre y su abandono.
El espectador camina sobre un hilo muy fino entre la alegría y el dolor. Aunque no un dolor que atormente sino uno que desconsuela. De un lado puede reír con las peripecias de Toni, crear una fuerte conexión y empatía con su personaje, y admirar la espontaneidad que logra en una mezcla de sutileza y tosquedad. Y del otro puede sufrir la incomodidad de Inès, la angustia de negar a su padre, su transformación y el descubrimiento de sus errores. Eso sí, muy pocos podrán sentir indiferencia con los personajes.
Resulta una película impredecible e inclasificable. Por ejemplo, que, siendo alemana, haga reír. Sin embargo, podría ubicarse dentro de las mejores del año 2016.
- Círculo de Críticos de Nueva York: Mejor película extranjera
- Premios del Cine Europeo: Mejor película, director, guión, actor y actriz
- Festival de Cannes: Premio FIPRESCI
- Globos de Oro: Nominada* a mejor película de habla no inglesa (próximos días)
Véanla, al ritmo de cada quien.
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